Estimadas familias,

Queridas niñas y jóvenes,

Apreciados educadores:

Iniciamos un año bendecido por la presencia de María Auxiliadora, como en los ambientes de Mornese y Valdocco dejando todo en manos de nuestra Madre de la vida y pidiendo la fortaleza y sabiduría a San José, Guía de la Iglesia universal y santo protector del primer año de funcionamiento de nuestro querido colegio.

Niñas y jóvenes, que este año el estudio, la oración y la alegría sean los pilares fundamentales de su camino. Cada experiencia de aprendizaje se planifica pensando en formarlas integralmente para ser buenas cristianas y honestas ciudadanas.

Estimadas familias, de ustedes depende la continuidad de la formación que brinda el colegio, sigamos construyendo nuestros hogares con el carisma salesiano caracterizado por la comprensión, tolerancia, empatía y amor por la familia.

Apreciados educadores, ustedes tienen en sus manos una gran misión, formar progresivamente a un ser personal, espiritual, corpóreo llamado a realizarse en un mundo; niñas y jóvenes entusiastas que necesitan de su optimismo, asistencia y profesionalismo para comprender la realidad y lograr transformarla.

Este año, juntos caminemos por la senda que nos permita hacer descubrir la vocación a cada integrante de nuestra comunidad. Al descubrir la vocación para la cual han sido llamados, sentirán la felicidad plena de tener a Dios en sus corazones y serán personas de bien, de verdad, de justicia y de amor. Así como hace 200 años, como pasó con el sueño de los 9 años a Juanito Bosco, construyamos espacios para convertir los sueños de las niñas y jóvenes en realidades plausibles, objetivas y felices.

Buen año para todos, que Dios nos colme de las gracias más selectas y María Auxiliadora sea nuestra compañera y protectora en el camino. Los dejo en los corazones de Jesús y María.

Con el cariño y estima de ayer, hoy y siempre,

Dr. Carlos Enrique Vento Cangalaya

Director del CEPMA